Tras su paso por las categorías inferiores, ascendió al primer filial en 2021 y en su primer año en categoría nacional se convirtió en una pieza fundamental del B franjirrojo. En 2022, y tras el descenso del primer equipo a la Segunda División de nueva creación (1RFEF en ese momento), Anita renovó con el conjunto vallecano ya como jugadora del primer equipo a todos los efectos. Al verano siguiente, y tras el nuevo descenso vallecano, el Racing se hizo con los servicios de la madrileña.